2012/12/31

Monte sin fama


National Geographic y otros canales documentales han colmado de fama al Amazonas.Lucas Viano.

National Geographic y otros canales documentales han colmado de fama al Amazonas. No es para menos: es la selva tropical más extensa del mundo, hábitat de una diversidad exuberante.
Quizá encandilados por los colores amazónicos que destilan las pantallas de TV, los argentinos nos hemos olvidado de nuestro Chaco. En el Gran Chaco viven más de siete millones de personas. La mitad de este ecosistema está en territorio argentino e incluye el norte y noroeste de Córdoba.
Según datos de las ONG Guyra y del Proyecto de Monitoreo de la Deforestación en la Amazonia Legal (Prodes) entre agosto de 2011 y julio de 2012, el desmonte en el Gran Chaco fue de 4.853 km2, contra las 4.656 en el Amazonas. En proporción, esa diferencia es aun más notoria si tenemos en cuenta que el Amazonas tiene una superficie cinco veces más grande que la chaqueña.
El impacto humano en esa región es grave. La extensión de la frontera agrícola no sólo arrincona a los montes argentinos, sino también a los bolivianos y paraguayos.
Sucede que la flora y fauna de este ecosistema no es tan famosa como la amazónica. Sin embargo, su biodiversidad podría ser envidiada por cualquier bosque tropical. Una de las razones de esta multitud de especies animales y vegetales es su extensión norte-sur, que le otorga variedad de climas.
250 especies de aves habitan únicamente en esta región. Allí residen al menos 10 tipos de armadillos, la mayor variedad en el mundo. Y comparte animales majestuosos con el Amazonas: jaguares, monos aulladores y tapires.
Todo eso está desapareciendo y quizá las cámaras de National Geographic nunca lleguen a documentarlo.

Fuente: La Voz del Interior.  30/12/2012.  http://www.lavoz.com.ar/ciudadanos/ambiente/monte-sin-fama

Sacar la madera caída, que sumará riesgo de incendios


El Foro de los Ríos pedirá declarar “zona de desastre ambiental” a los sectores azotados por las tormentas de viento

El Foro de los Ríos pedirá declarar “zona de desastre ambiental” a los sectores azotados por las tormentas de viento.
La asociación civil que involucra a instituciones, municipios y comunas de la zona norte de Calamuchita planteó que “cada localidad afectada dentro de su ejido fue resolviendo los problemas contando con el apoyo de la Provincia, pero amplias zonas rurales han quedado devastadas y no hay ninguna acción sobre ellas”.
“Basta con recorrer Atos Pampa, Intiyaco, Villa Berna, Villa Alpina o Yacanto, entre otras regiones, para advertir que hay más de dos mil hectáreas de bosque caído, lo que constituye un real peligro para la próxima temporada de incendios. Tenemos como máximo seis meses para extraer esta madera para industrializar, pero no tenemos cómo hacerlo. Es necesario que los gobiernos nacional y provincial adviertan la situación”, señaló Jeremías Ferella, productor forestal e integrante del Foro.
Entre otras cuestiones, si se declara la emergencia en el “Alto Calamuchita”, exigiría no tocar las plantas verdes en pie y extraer sólo la madera caída, con el compromiso de todos los aserraderos para trabajar con esa madera.
“Por seis meses, tendremos una oportunidad para la industria forestal, si es que podemos extraer lo que cayó. Si no, dentro de seis meses, habrá otra emergencia, pero por el alto riesgo de incendio”, señaló Sergio Favot, actual presidente del Foro de los Ríos y exintendente de Villa General Belgrano.
Desde el sector forestal, en tanto, es unánime el pedido de mayor apoyo a entidades gubernamentales. La mayor urgencia es para poder acelerar el proceso de extracción. A su vez, varios cuestionaron el pedido de que cada propietario hiciera un relevamiento propio, cuando podría hacerlo algún organismo oficial, con algún método que ofrezca precisión y rapidez.
El productor Ferella opinó que el problema no ocupó hasta ahora demasiado espacio en los medios de comunicación y eso no ayudó a visibilizarlo para lograr soluciones.

Fuente: La Voz del Interior. 29/12/2012.   http://www.lavoz.com.ar/ciudadanos/ambiente/sacar-madera-caida-que-sumara-riesgo-incendios


La mayor parte del desmonte de 2012 se hizo en zona roja



Es la categoría de mayor protección por el grado de conservación del bosque nativo. De marzo a noviembre, se deforestaron 7.806 hectáreas


Desde junio a noviembre, los desmontes en el bosque chaqueño cordobés se dieron en su mayoría en predios ubicados en la categoría roja según la ley de bosques nativos.
Estos sitios son los que poseen el monte mejor conservado y en los que menos intervención humana debe haber.
El desmonte total de predios con bosque autóctono está prohibido en la provincia, ya que rigen las leyes provinciales de bosques nativos (9.814), sancionada en agosto de 2010, y la 9.219, sancionada en 2005, que prohíbe la deforestación total de campos.
Sin embargo, la norma provincial sí prevé la intervención del bosque para actividad agroganadera como desmonte selectivo e implantación de pasturas exóticas. Incluso autoriza el desmonte total, si el sitio es apto para riego.
Desde sectores ambientalistas señalan que por este motivo y otros la ley provincial sería inconstitucional al no respetar los presupuestos mínimos que exige la ley nacional. La Corte Suprema de Justicia tiene en su poder una presentación judicial en este sentido realizada por la Universidad Nacional de Río Cuarto.
La propia ONG Guyra, que realiza los informes mensuales a través de imágenes satelitales, resalta el caso cordobés: “Se destaca nuevamente la deforestación ocurrida en Argentina en la provincia de Córdoba, desmontes en la zona roja categorizada como de ‘protección boscosa’, según la ley de bosques”.
Luego menciona los casos anteriores de desmonte en zona roja. Ocurrieron en junio y octubre.
Noviembre “tranquilo”. Noviembre no fue la excepción y también se detectó desmonte en el bosque chaqueño cordobés. No obstante, fue el mes menos crítico. Desaparecieron 230 hectáreas distribuidas en los departamentos Ischilín (84 hectáreas), Río Seco (41), Sobremonte (57) y Tulumba (48).
Un mes “tranquilo” comparado con los anteriores cuando la deforestación rondó entre las 640 y 3.300 hectáreas mensuales. El pico de los desmontes se dio entre junio y septiembre.
El departamento de Ischilín sigue siendo el más afectado por esta actividad. A 11,5 kilómetros al norte de Quilino por la ruta nacional 60 las imágenes satelitales registraron varios predios desmontados en zona roja. Esta escena se repitió durante todo el año.
La tasa anual de desmonte alcanza las 23,3 hectáreas diarias. Es decir que se desmontan por día el equivalente a bosque nativo chaqueño de 31,5 canchas de fútbol como la del Estadio Mario Kempes.
Sólo quedan 600 mil hectáreas de bosque nativo en pie de las 12 millones que supo tener Córdoba a inicios del siglo 20.
En una hectárea de bosque nativo bien conservado puede haber hasta 500 especímenes de quebracho, algarrobo, entre otros. También pueden existir hasta 500 individuos de arbustos como brea, espinillo, garabato, tala, chañar y mistol.
Servicios ambientales. Este bosque provee servicios ambientales como la regulación hídrica en cantidad y calidad, conservación del suelo, la purificación del aire y la protección de flora y fauna autóctona.
El 31 por ciento del territorio del noroeste cordobés está desertificado, según un estudio de Alicia Barchuk, investigadora de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).
La especialista adjudica este problema a los desmontes y rolados para cambiar el uso de suelo y convertirlo en predios cultivables o ganaderos.
El objetivo de la ley de bosques debería ser la protección de estos ecosistemas y determinar qué actividades se pueden realizar en ella según su grado de conservación (verde, amarillo y rojo).
Pero el texto provincial no cumple con ese objetivo, según los ambientalistas. Sin embargo, tampoco conforma a los productores rurales.
A su vez, el pedido de inconstitucionalidad ante la Corte Suprema impide que la Provincia reciba los fondos de la Nación destinados a reforzar los controles y a compensar a los dueños de los predios que conservan el monte nativo. Son alrededor de 20 millones de pesos anuales.

Fuente: La Voz del Interior.  http://www.lavoz.com.ar/ciudadanos/ambiente/mayor-parte-desmonte-2012-se-hizo-zona-roja